RECORDAR ES VIVIR

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Quién olvida su historia, está condenado a repetirla

Frase del poeta y filósofo español Jorge Agustín Nicolás Ruiz de Santayana escrita en la entrada del bloque número 4 del campo de Auschwitz.

Rolando Araya y el PLN.

Hace un par de días, en el programa Matices de Radio Monumental que dirige el periodista Randall Rivera, estuvo Rolando Araya Monge, y de esa entrevista transcribo palabras dichas por Araya en ese programa:

“No me costó aceptar el resultado de la convención, yo le di el apoyo inmediatamente al candidato ganador, lo recibí con mucho cariño aquí en mi casa…, yo pensé que estaría en el equipo titular.”

“Yo quería que me entregara el partido para enderezarlo, como presidente del partido, yo tengo experiencia, nadie tiene más experiencia que yo ahí en Liberación, fui Secretario General, secretario de la Internacional, presidente de la Juventud, fui jefe de campaña, estuve muy involucrado en muchas campañas, fui candidato presidencial…”,

Y empecé este relato histórico con esas palabras de Rolando, porque una persona no se define si algunas veces deja la corbata a un lado, y se viste con una camisa hawaiana…, y es lo que estamos viendo, por tercera vez deja su bandera y se cobija con otra, pero toda su vida, para bien o para mal, han sido dentro del partido Liberación Nacional y eso no cambiará jamás, él es lo que es, liberacionista por dentro y por fuera, aunque ahora se cobije con la bandera de Costa Rica Justa.

Y es que efectivamente Rolando Araya Monge ha hecho su vida a la par del partido Liberación Nacional primero como miembro del Consejo Universitario representando al PLN y luego como director del periódico Combate, del PLN. En 1974 fue diputado por la provincia de Alajuela, de ahí pasa a ser Ejecutivo Municipal del cantón de San José, y de ahí Ministro de Obras Públicas y Transportes, en el gobierno de su tío, Luis Alberto Monge Álvarez.  Muy pronto se vincularía a las actividades internacionales de la socialdemocracia y en 1978 es electo Vicepresidente de la Unión Internacional de Juventudes Socialistas, IUSY, y de toda esa vinculación él se define claramente como socialista y más recientemente como socialista cuántico.

En 1996 fue elegido vicepresidente de la Internacional Socialista durante el congreso de esta organización llevado a cabo en Nueva York. Araya pasó a ser parte también de la Comisión Progreso Global, encabezada por el expresidente del gobierno español Felipe González.

En 2002 fue candidato a la presidencia de Costa Rica pero resultó derrotado tanto en primera como en segunda ronda electoral por el candidato socialcristiano Abel Pacheco. En 2004 Araya fue elegido Presidente del Comité de la Internacional Socialista para América Latina y el Caribe, SICLAC.  Esa es la trayectoria de Rolando Araya con el partido Liberación Nacional, una estrecha vinculación de casi 50 años, prácticamente toda su vida desde adolecente hasta su vejez, a pesar de los berrinches pasados y el actual.

En el 2010, fue candidato a la presidencia de la República por el partido Alianza Patriótica, cuya ideología era de izquierda y progresista. En el 2012 regresa al PLN para apoyar a su hermano Johnny en la precandidatura y posterior candidatura a la presidencia, pero posteriormente se vuelve a alejar y se postula como candidato a diputado para las elecciones del 2018 con un partido provincial llamado Todos, junto a su compañera radial, Iris Zamora, de reconocida postura socialista revolucionaria. Otra vez, regresa al PLN y se postula como precandidato en el 2021, convención que pierde ante José María Figueres, se vuelve a ir de su casa, y ahora se presenta como candidato del partido fundado por Dragos Dolanescu, un diputado que se ha declarado totalmente de derecha y anti comunista, parte del Frente Latinoamericano por la Libertad, que lucha contra los avances del Socialismo y del Comunismo, y es donde uno no entiende como se come ese arroz con mango, un partido de Derecha (al menos en teoría) con un candidato de Izquierda, y digo “en teoría” porque el Secretario General de ese partido Costa Rica Justa es Jorge Elías Vargas Corrales, hijo de don Humberto Vargas Carbonell, secretario general del Partido y Movimiento de izquierda comunista, Vanguardia Popular, y entonces eso genera mucho más interrogantes que certezas.

Un poco de historia sobre la familia Araya.

Tratar de desvincular a Rolando Araya del partido Liberación Nacional es algo tan difícil y casi imposible, como tratar de desvincularlo de su familia, de su tío el expresidente Monge, y mucho menos de familia más cercana como lo son los hermanos Araya Monge, conocidos como el clan Araya.

Los Hermanos Araya Monge son : Emilia, Rolando, José Fabio (qdDg), Luis Carlos, y Johnny Araya Monge, todos hijos de José Fabio Araya Vargas, quien fuera diputado en dos períodos con el PLN, 70-74 y 82-86, y de Miriam Monge Álvarez, hermana del ex presidente Monge.

Justo en el año 1974, cuando Rolando iniciaba como diputado y su padre venía dejando su curul, sus hermanos fundan el Movimiento Revolucionario del Pueblo, cuya ideología era el Comunismo, el Marxismo-leninismo y el Trotskismo, y que presidió José Fabio Araya Monge, movimiento que posteriormente en 1978 haría yunta con el partido Vanguardia Popular, y el Partido Socialista Costarricense, para entre todos formar el partido Coalición Pueblo Unido, partido con el que Johnny llegaría a ser regidor del cantón de San José, en el período 82-86. Recordemos que antes de la figura de alcalde, lo que había era un Ejecutivo Municipal que lo elegían los regidores, y fue así como Johnny llegó luego a ser Ejecutivo Municipal desde 1991 y quedarse ahí por 30 años casi ininterrumpidos, más que por el período en que abandonó el puesto para buscar la presidencia de la República en el 2014, en donde fue el protagonista de la peor candidatura que ha presentado ese partido, donde abandona la aspiración para la segunda ronda, y eso le cuesta ser sancionado por el Tribunal de Ética y salir del PLN, para poder buscar de nuevo la alcaldía con un partido cantonal.

Muchos no lo recordarán o no quizá no lo saben, pero un 14 de febrero de 1985, el MRP, Movimiento Revolucionario del Pueblo, estuvo vinculado a un asalto bancario a la agencia del Banco Nacional de Costa Rica, en Filadelfia, Guanacaste, de donde sustrajeron 5 y medio millones de colones, pero al igual que pasó con José María con el caso Chemise que su padre era presidente, en éste caso, el tío de los Araya Monge era el presidente de la República.

Un poco de historia sobre el PLN y el narcotráfico.

Como lo dije anteriormente, no se puede desvincular a Rolando Araya Monge de sus hermanos, ni de la historia del PLN, incluyendo la relación histórica con el narcotráfico.

El caso más reciente fue la presunta vinculación con un grupo narco de la zona Sur, del actual diputado Gustavo Viales y su padre, Carlos viales, actual alcalde de Corredores, ambos del PLN.

Pero vámonos más atrás, remontémonos al año 1973, durante la administración de José Figueres Ferrer, año en que el delincuente internacional Robert Lee Vesco ingresa a nuestra país, luego de que la Comisión de Bolsa y Valores lo acusara de robarse $224 millones  de inversionistas de Overseas Ltd, un conglomerado financiero con sede en Suiza, además de otro cargo por la contribución que hiciera a la campaña de Nixon a cambio de “favores”,  y lejos de contribuir a su captura, el entonces presidente Figueres presionó a la Asamblea Legislativa para que aprobaran una Ley para impedir su extradición, que luego se conocería como la ley Vesco. Y el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) le concedió la condición de residente rentista.

Más bien en aquellos años, Pepe Figueres llegó a decir: Ojalá vinieran más Vescos a Costa Rica

Lo cierto es que Robert Lee Vesco, además de millonario y estafador, era parte importante de la operación del Cartel de Medellín, y entre 1968 y 1980, el fugitivo estadounidense ayudó al colombiano Carlos Lehder Rivas a establecer un eslabón en Bahamas para el transporte aéreo de centenares de toneladas de cocaína del cartel de Medellín hacia EE.UU.

Hay dos libros que narran y cuentan toda esa vinculación, El libro “El gran Engaño” del español José Friedl y otro de Jhon Jairo Velásquez Vásquez, conocido como “Popeye”, ex secretario privado y jefe de seguridad de Pablo Emilio Escobar Gaviria, y en ambos se habla de la vinculación de Raúl Castro, con el cartel de Medellín y como protegió durante años embarques de droga que llegaron a Miami pasando por Cuba.

El libro de Friedl es una meticulosa compilación de publicaciones y documentos oficiales, en su mayoría de Estados Unidos, de la CIA y de la DEA, y el de Popeye se basa en lo que él como testigo de todo puede contar. Ambos libros coinciden en las relaciones de los Castros con los narcotraficantes Robert Vesco, Carlos Lehder, el ex dictador panameño Manuel Antonio Noriega y el régimen sandinista de Nicaragua.

Por otro lado, Oscar Arias Sánchez recibió una donación de 20.000 dólares de una empresa estadounidense acusada de tener relaciones con el narcotráfico, Ocean Hunter Inc., en 1985 un cheque por 20.000 dólares, firmado por el señor Frank Chanes , para ayudar a financiar la campaña 1985-1986.  Además, en el libro «America’s Prisoner» escrito por Manuel Antonio Noriega y Peter Eisner, se afirma que Arias recibió dinero del ex gobernante panameño para su campaña presidencial de 1986, y cabe recordar que el general Noriega había convertido a Panamá en lo que desde EEUU consideraban  “la primera narco cleptocracia del hemisferio”, a pesar de que llegó a la presidencia con el favor de los EEUU y de la CIA Norteamericana.

Encuentros de Arias con Noriega

Y es que en aquellos años de la década de los 80´s,, fue muy común que muchos de los colaboradores de seguridad de la CIA en el extranjero se involucraron en casos de narcotráfico.

Es particularmente ilustrativo el caso de John Hull, mercenario norteamericano que servía de enlace en Costa Rica entre la CIA y los narcotraficantes. Este tenebroso personaje controlaba la recepción de armas para la contra y el despacho de drogas a Miami. Si se quería algo ilegal en Costa Rica había que contactar con John Hull, recuerda un lugarteniente de Noriega de apellido Blandón. Y es cierto, casi llegó a ser el hombre más poderoso de Costa Rica…, pero para contar toda esa historia, requeriría escribir un libro. Pero para el tema que nos ocupa, Hull fue parte una red narco del Área de la Bahía de San Francisco, que vendió toneladas de cocaína a las pandillas callejeras Crips y Bloods de Los Ángeles y canalizó millones de dólares en ganancias de drogas a un ejército guerrillero latinoamericano dirigido por la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. y a él.

Recordemos que fue durante la administración de Luis Alberto Monge, en 1985, que ingresa al país el narcotraficante mexicano Caro Quintero, exlíder del cartel de Guadalajara y vinculado a través de Félix Gallardo, con el cartel de Medellín y con Pablo Escobar.

Hablamos seguramente de la “época de oro” del narcotráfico colombiano donde Costa Rica jugaba un papel importante, ya que en los terrenos de Hull que contaban con pistas de aterrizaje, se desalmacenaba de todo, drogas, armas y quien sabe que más, todo bajo la protección de los gobiernos liberacionistas desde 1970 hasta 1990, incluido en esas dos décadas, el gobierno de Rodrigo Carazo, al que es necesario reconocerle que fue quien impidió que Vesco pudiera regresar a Costa Rica, después de un viaje a las Bahamas.

Recordemos también a quien desde 1985 ha sido un nombre relacionado al PLN y al narcotráfico. Ricardo Alem León, parte de la Comisión de finanzas y signos externos durante la campaña de Oscar Arias, que ya una vez electo presidente, lo nombra como representante de Costa Rica en Banco Centroamericano de Integración Económica BCIE, y en el año 88, Arias le pide la renuncia debido a que sus cuentas bancarias ya habían despertado todo tipo de sospechas, y ese mismo año, detienen en el aeropuerto Juan Santamaría al socio de Alem, Mario Valverde Zamora con una maleta con casi $800 mil dólares, y dos días después, Alem también fue detenido y empezó un largo litigio hasta 1993, donde se condenó a Valverde y se absolvió a Alem, sentencia que fue apelada por la fiscalía, y justo antes de conocerse el por tanto de esa apelación en el año 1995, Alem fue arrestado en la Florida por la DEA que lo vinculaba con el trasiego de 15 kilos de cocaína envueltos en paquetes de café de Costa Rica, que le habían sido decomisado a una asistente de Alem. Poco después de su captura en los EEUU, las autoridades de nuestro país allanaron su casa en Heredia y decomisaron más paquetes de droga envueltos en empaques de café.

Por ese delito fue condenado a nueve años de cércel en los EEUU y a 12 años aquí en Costa Rica. En el 2001 regresa a CR a terminar de cumplir su condena en el país, y luego de quedar libre, en el 2008 se le vuelve a vincular a actividades de narcotráfico y en el 2010, nuevamente es condenado a 20 años de cárcel y estando ya de nuevo en libertad, el pasado 6 de enero de éste año, nuevamente fue detenido y le encontraron 8 millones de colones en el carro en que viajaba, y aunque quedó en libertad, el dinero si le fue decomisado.

Otro caso muy sonado en 1987, fue el del entonces diputado del PLN,  Leonel Villalobos Salazar, y quien fungía como Presidente de la Comisión de Seguridad y Narcotráfico, fue investigado por vínculos con grupos narcos. Un año después, Villalobos estuvo cerca de obtener la presidencia de la Asamblea Legislativa, sin embargo, los escándalos con los que fue vinculado no le permitieron presidir el Congreso. A Villalobos se le vinculaba al narcotraficante argentino Roberto Fiona y además, es ampliamente conocida la estrecha amistad que tenía con Ricardo Alem.

Villalobos fue capturado en 1997 tras intentar vender drogas a un policía encubierto, en una operación coordinada entre el Ministerio de Seguridad Pública (MSP) y agentes de  la DEA.

En 1998 Villalobos fue condenado, quedó en libertad en el 2003, y diez años después, en 2013 resultó sobreseído por lavado.

Ahora sí, regresando al inicio de éste artículo, de ésta recopilación abreviada de hechos reales, y a lo dicho por Rolando Araya, cuando mencionó todos los cargos que ocupó en el Partido Liberación Nacional, y que para esos años fue presidente de la Juventud, ministro y luego Secretario General, solo puedo terminar haciéndole una serie de preguntas, que ojalá pueda responder durante la campaña:  ¿Dónde estaba usted don Rolando mientras el narcotráfico se infiltraba en el Partido Liberación Nacional y en otras esferas del país? Su vida entera ha estado vinculada desde todos los puestos y cargos públicos a ese partido, ¿ nunca se enteró de lo que pasaba, o se hizo de la vista gorda?  

El país entero debe escuchar una muy amplia explicación sobre su verdadero sentir ideológico, sobre su inestabilidad política y falta de claridad en la toma de decisiones que durante su vida y sus berrinches ha demostrado con el “me voy, vuelvo, me vuelvo a ir, otra vez vuelvo, me vuelvo a ir…” , pero sobre todo, ¿por qué nunca denunció todo el tema del narcotráfico en su partido?

Ojalá que los costarricenses tengan la oportunidad de escuchar esas explicaciones antes de votar por usted, y ojalá no salga con la misma cantaleta de su ahora oponente José María Figueres de que dejemos el pasado atrás y veamos el futuro, porque quien olvida su historia, está condenado a repetirla, y para poder soñar con un mejor futuro, es necesario saber que el presente lo creó el pasado, y por eso: Recordar es vivir.

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